Ahora sí que sí, llego la hora de despedirnos del curso haciendo una actividad diferente y especial donde nos lo hemos pasado genial ¡y nos hemos pringado muchísimo!
En este último mes hemos estudiado a la artista española Cristina Iglesias, cuyo trabajo nos ha llevado al mundo natural, a perdernos en los bosques y en sus laberintos mimetizados con el entorno. Y es que esta artista ha transformado el concepto de escultura en el ámbito de las instalaciones, sus obras reflejan el uso de diferentes materiales (hormigón, alabastro, resina, hierro, cristal, a veces combinados con motivos vegetales como el bambú y la hojarasca) y diferentes técnicas (bajorrelieve, tapiz o serigrafía en gran formato, sobre seda y cobre), y delatan el interés de la artista por el espacio, la arquitectura, el contraste de texturas y materiales, así como la relación que éstos establecen con el espacio para el que están pensados.
Teniendo en mente el tipo de trabajos que realiza nuestra artista elegida del mes, en esta ocasión y como reto final del curso, hemos dejado a un lado la bidimensionalidad del papel para meternos a tope con una actividad 3D en forma de bajorrelieve en arcilla ¡pringue total!
Lo primero que hay que hacer antes de ponernos manos a la obra, es conocer la diferencia que existe entre un relieve y una escultura, y esto es que, un relieve solo tiene información volumétrica en una de sus caras, es decir, son partes que sobresalen de una superficie plana. Para que nos entendáis, esto es como las montañas sobresaliendo del suelo.
Una escultura, en cambio, nos aporta información desde todos los puntos de vista, es decir, podemos rodearla y tiene volumen en todas sus dimensiones.
Y aprendido esto...¡no! no nos manchamos aun porque es imprescindible tener en cuenta otra parte importante que hemos de explicar, ¡la actividad técnica del mes! En esta ocasión hemos hablado de la composición, es decir, el peso visual que aportan los elementos que colocamos en nuestros dibujos para que esté equilibrado y que lo doten de estabilidad.
¡Ahora sí! comenzamos nuestro bajorrelieve realizando una placa plana y lisa donde hemos calcado y elementos naturales como los que utiliza de inspiración Cristina Iglesias, en nuestro caso, hojas de diferentes tipos de árboles colocados equilibradamente en la superficie y teniendo en cuenta la composición, el peso visual y el equilibrio, para poco a poco ir trabajando el relieve reduciendo el grosor de la placa en el fondo para que las hojas queden más en superficie. Después, hemos decorado con texturas de efectos rugosos y naturales la placa de arcilla.
Echadle un vistazo a este vídeo de ejemplo para que conozcáis el proceso.
Y una vez seca la arcilla la hemos pintado con acrílicos ¡sin un poquito de color no somos nadie!
La verdad, en este curso l@s alumn@s no han dejado de sorprendernos.
¡qué pasada de trabajos!
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